domingo, 4 de febrero de 2007

INTRODUCCIÓN

Si alguien me preguntase que cuando me empezó a gustar viajar, creo que no sabría responder.
El recuerdo más lejano va asociado a las pastillas de biodramina y, desde luego, no es muy agradable. Pero, poco a poco, el problema del mareo se fue solucionando.
El gusto por conocer nuevos lugares nos lo inculcaron nuestros padres. Con un 600, malas carreteras y mucho ánimo, fuimos recorriendo España.
Unos cuantos años mas tarde tuve mi primera cámara fotográfica automática y descubrí que también eso me gustaba, puesto que me permitía recordar todos aquellos lugares que había visitado anteriormente.
Por fin, hace no mucho tiempo, un compañero de trabajo me pidió que le preparara un itinerario por París, donde iba a pasar unos días.
Si he contado todo esto es porque la unión de todas estas aficiones y la suerte de tener un hijo informático, que ha confeccionado esta página, me permite compartir con otras personas algunos lugares que he conocido.
He titulado ésta página mis paseos porque, en principio, la idea era llevar al lector paseante por unas determinadas calles en las que se encontraban los monumentos mas relevantes de una ciudad.
Varios de mis “recorridos” han sido publicados en una revista digital que se publicaba en mi centro de trabajo.
Como consecuencia de esta publicación, otros compañeros que iban a viajar a zonas que yo conocía me han pedido información sobre las ciudades, pueblos y lugares que podían visitar.
Esto ha dado lugar a mis relatos sobre algunos de mis viajes y , ahora, quiero compartir con más amigos viajeros.

No hay comentarios: